martes, 16 de diciembre de 2014

Inmigración- Manuel Delgado

Manuel Delgado Ruiz -Inmigración

Una metrópoli tiene que tener gente de toda clase, venida desde cualquier parte del mundo. Una ciudad no puede abastecerse a sí misma (en lo que a producción se refieres: mano de obra, materias primas…) por lo que necesita inmigrantes tanto de otras ciudades como de otros países. Esto da lugar a una mezcla de razas y culturas. Es necesaria una “invasión” migratoria para el desarrollo de la ciudad para convertirse en un nuevo ingrediente asociativo (intercambio y cooperación entre los diferentes individuos. Inmigrante se debería denominar a aquella persona que recién acaba de llegar a un ciudad, más no la que prosigue durante un tiempo determinado en dicha ciudad. En Europa la inmigración se ve como un problema, cuando en realidad ha sido una solución (necesaria para la supervivencia de las sociedades urbanas)

Un inmigrante es un atributo y tiene una connotación negativa. El papel de inmigrante será perpetuado tanto a él como a sus descendientes, aunque lleven residiendo durante generaciones en una  ciudad. El término de inmigrante es siempre empleado en un sentido negativo, por ejemplo; siempre se piensa que el inmigrante es una persona poco o nada cualificada al tener que emigrar. Es por este y otros motivos que al inmigrante se lo trata como un ser inferior. También se tiene un concepto de inmigración, como excesiva, esto da lugar a múltiples debates.

El papel del inmigrante es fácilmente vulnerable, división de asalariados ( legales  e ilegales).


En conclusión, el inmigrante es una persona que aporta a un sociedad más aspectos positivos, de los negativos que la gente de a pie pueda pensar 

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